Malala Yousafzai, icono internacional, activista en pro del derecho a la educación y la persona más joven en haber recibido el Premio Nobel de la Paz, relata una historia inspiradora de lo que fue crecer en una región desgarrada por la guerra y, sin embargo, ver la magia de la esperanza adondequiera que mirase.
Malala Yousafzai, icono internacional, activista en pro del derecho a la educación y la persona más joven en haber recibido el Premio Nobel de la Paz, relata una historia inspiradora de lo que fue crecer en una región desgarrada por la guerra y, sin embargo, ver la magia de la esperanza adondequiera que mirase.
Cuando Malala era niña en Pakistán quería tener un lápiz mágico. Lo usaría para:
-poner un pestillo en su puerta; así sus hermanos no podrían molestarla.
-detener el tiempo para dormir una hora más cada mañana.
-borrar el olor del basurero que había cerca de su casa.
Pero, con el tiempo, su mundo cambió, lo mismo que sus deseos. Su derecho a ir a la escuela se vio amenazado... simplemente porque era una niña. En vez de un lápiz mágico, Malala cogió uno de verdad. Sola en su habitación, escribió sobre los desafíos a que se enfrentaba, pero sus palabras llegaron a gente de todo el mundo.
Colección
Libros Singulares (LS)
Código
3432799
I.S.B.N.
978-84-9104-883-1
Publicación
19/10/2017
Clasificación IBIC
YFY
Formato
Papel
Páginas
48
Colección
Libros Singulares (LS)
Código
3432811
I.S.B.N.
978-84-9104-954-8
Publicación
17/10/2017
Clasificación IBIC
YFY
Formato
PDF
Colección
Libros Singulares (LS)
Código
3432800
I.S.B.N.
978-84-9104-884-8
Publicación
17/10/2017
Clasificación IBIC
YFY
Formato
ePub
Autor
Malala Yousafzai
Malala Yousafzai es cofundadora y miembro de la junta directiva del Malala Fund. Comenzó su campaña por la educación a los once años, cuando de forma anónima escribía un blog para el servicio en urdu de la BBC sobre su vida en el valle de Swat bajo los talibanes. Animada por el activismo de su padre, Malala empezó a hablar públicamente en pro de la educación de las niñas, por lo que recibió premios y la atención de los medios internacionales. A la edad de quince años sufrió un atentado a manos de los talibanes por la defensa de sus convicciones. Se recuperó en el Reino Unido y continuó su lucha por las jóvenes. En 2013 fundó con su padre, Ziauddin, el Malala Fund. Un año más tarde, recibió el Premio Nobel de la Paz en reconocimiento por sus esfuerzos para que cada niña tenga acceso a doce años de educación gratuita, segura y de calidad. Actualmente estudia filosofía, política y economía en la Universidad de Oxford.